7 razones que explican porque los CEOs fracasan

al intentar implementar un ERP

Agustín Cruz Lozano
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Sabes que implementar un ERP te va a ayudar automatizar tus procesos y hacer crecer tu empresa, pero a pesar de haber probado tres o cuatro software diferentes, aún no has conseguido que ninguno funcione.

Quizás también hayas probado con una implementación en modo "hágalo usted mismo", y también contratado a dos o tres consultores diferentes, pero los resultados no llegan.

¿Por qué?

En los años que llevo ayudando a los empresarios a hacer crecer sus empresas a través de un ERP he descubierto unos  patrones comunes de errores que cometen.

Te traigo aquí resumidos los 7 motivos principales por los que los empresarios no están consiguiendo resultados con su ERP:

  1. Comprar un software que no necesitas. Muchas veces, cuando no estás a gusto con los resultados de tu empresa, cambias el software pensado que eso es lo que está fallando. Sin embargo, la solución normalmente consiste en realizar pequeños ajustes en la forma en como realizan las tareas.
  2. No tener definida una estrategia. Antes de seleccionar un ERP, primero debes definir el resultado que esperas, como vas a medir si el proyecto está dando resultados, de preferencia de forma cuantitativa. Sin esta claridad, nunca sabrás si tu ERP está alcanzando el retorno de inversión esperado o no.
  1. Realizar una pobre planeación y gobernanza. Como en cualquier otro proyecto, la planeación es clave. Tener un plan demasiado ambicioso o con muy poco nivel de detalle es una receta segura para el fracaso. Además, para que tu plan sea a prueba de fallos, debes incluir un plan de contingencia y otro de gestión de riesgos.
  2. Exceso de optimismo. Por naturaleza, los seres humanos somos optimistas. Pero aunque un poco de optimismo es bueno, a menudo nos lleva a minimizar el tiempo y el esfuerzo necesarios para realizar una tarea. Recuerda que no se trata solo de cambiar las pantallas con las que trabaja tu equipo, sino de transformar radicalmente la forma en que se comporta tu empresa.
  3. No tener el equipo de trabajo correcto. La implementación de un ERP es demasiado trabajo como para que una persona, a veces incluso un equipo, lo gestione. Es importante que cuentes con alguien que haya recorrido antes el camino, que te pueda ayudar a conocer el panorama general, a saber como las decisiones pueden afectarte en el futuro y de que manera puedes minimizar los riesgos.
  4. La tendencia a ocultar nuestros errores. Todos queremos quedar bien. Tendemos a restamos importancia a los riesgos y problemas que surgen durante la puesta en marcha del ERP para evitar las preocupaciones y temores. Por lo regular esto es contraproducente.
  5. Modificar demasiado el software. A todos nos gusta que el ERP se adapte a nuestras necesidades. Pero muchas personalizaciones complican demasiado el plan de trabajo. Antes de modificar el software debes considerar cuidadosamente que el beneficio sea de verdad importante en el largo plazo.

¿Te has sentido identificado con alguno de ellos?

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