Recientemente, el concepto de SaaS o Software como Servicio ha irrumpido de forma importante en la industria de software y Tecnologías de la Información. Algunos reportes estiman que durante el 2013 los gastos en SaaS llegaran a representar el 16% del valor de la industria del software y en el 2015 llegarán a representar ingresos por más de 23 billones de dólares.

Las empresas, grandes y pequeñas, están viendo en SaaS una alternativa para hacer más eficientes sus departamentos de Tecnologías de la Información y reducir significativamente los costos de operación al mismo tiempo que eliminan los complicados procesos necesarios para administrar las aplicaciones corporativas y garantizar la seguridad de los datos que manejan.

Por lo general, las aplicaciones SaaS, logran cubrir las necesidades de negocio en áreas tales como la contabilidad, la colaboración social, y la gestión de relaciones con los clientes (CRM), a unos costos y con unas prestaciones que no se podrían conseguir fácilmente de otra forma. Por ejemplo en ocasiones el software necesario no se encuentra disponible en una forma que sea fácil de ejecutar como un paquete organizado, cuando la complejidad de la administración del sistema es tan alta que hace los costos prohibitivos, o simplemente cuando se requiere la compra de licencias para cada uno de los miembros de la organización.

En otras ocasiones, las compañías recurren a SaaS, porque no desea llevar a cabo las actualizaciones y el mantenimiento de las aplicaciones por falta del personal capacitado, o porque necesitan mantener sincronizados sus datos entre varios servidores ubicados en distintos puntos geográficos.

Las aplicaciones SaaS cuentan con altas tasas de disponibilidad, son fáciles de adoptar ampliamente en toda la organización, y están disponibles en casi cualquier equipo de cómputo o dispositivo móvil en cualquier momento.

Sin embargo, uno de los pequeños secretos del SaaS es que, debido a que el software es propiedad de otra persona, por lo general, no es posible hacer una copia del mismo para ejecutar en otros servidores fuera de los proporcionados por el dueño.

Muchas compañías empiezan a utilizar las aplicaciones SaaS con la creencia de que, en el momento en que sea necesario, va a ser fácil para ellos emigrar a otro sistema. Pero eso va en contra de los planes de los proveedores de SaaS, que buscan acuerdos a largo plazo para retener a los clientes eliminando las posibles estrategias de salida.

Además, normalmente, las soluciones SaaS ofrecen muy poca posibilidad de personalización debido a la que la arquitectura en la que están basadas hace uso del mismo código para muchos clientes diferentes. Entonces, ¿qué se puede hacer en el momento en que la organización crece o cambia? ¿De que forma se puede sacar el máximo provecho de las aplicaciones SaaS a corto y a largo plazo? La respuesta es OpenSaaS.

OpenSaaS continúa con el concepto de ofrecer el software como servicio, pero utilizando tecnologías de código abierto para implementar soluciones en todos aquellos puntos que podrían ser cruciales a la hora de garantizar la portabilidad de las aplicaciones. Esto significa que en el momento en que las empresas lo requieran, pueden obtener una copia del código de la aplicación, de sus datos, diseños y cualquier otra adaptación realizada al sistema y transportarlos a cualquier servidor.

Además, al hacer uso de aplicaciones de código abierto, las empresas se benefician de la constante innovación proveniente de los esfuerzos colectivos los desarrolladores que participan activamente en cada uno de los diferentes proyectos. Y lo más importante, al ser un servicio, permite a las empresas centrarse en sus competencias básicas, en el core de su negocio, sin tener que sacrificar recursos en el mantenimiento de la infraestructura que soporte sus operaciones.

OpenSaaS se trata de libertad. Significa que debe ser más importante la estrategia de salida que cualquier otra cosa. Significa también, que los proveedores deben esforzarse por entregar valor añadido a sus productos de forma tal que se excedan las expectativas de los clientes.

OpenSaaS toma la innovación generada por los sistemas de código abierto, y la hace crecer de forma exponencial al combinarla con los beneficios del SaaS, simplificando la administración de las aplicaciones y manteniendo reducida los costos y la complejidad de la infraestructura de TI en las empresas. Significa una era sin precedentes en la que las organizaciones pueden elegir la forma de usar las aplicaciones de forma que mejor se adapte a sus necesidades del día de hoy y de mañana.